De amores fingidos
En campos de sombras esparciré tu nombre,
vedado con los arrebatos de la indiferencia
y haré volar viejas coplas de otoño
entre los biseles curvos de tu existencia.
Con un soplo de luz me otorgaré la vida
para poder rondar tus rincones vespertinos
y con el preludio del renglón nocturno
haré de la sospecha y complicidad tu destino.
Mi mirada, con los ojos de la ausencia,
trepará por la línea de tu espalda,
y en la lucerna que tus cabellos forman,
dejaré violín y de llantos guirnaldas.
En la semilla que nazca de la escarcha
perpetuaré el contorno de tus besos,
y en un esbozo de mañana y de presente
tu recuerdo y mi futuro serán presos.
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